sábado, 19 de enero de 2013

Bienvenida


     El duende nace tras haber ingerido los alimentos que nos aporta la naturaleza, embalsamados en muchos casos con el oro líquido de nuestra tierra, embajador universal del solar giennense, de ahí que letras y gastronomía vayan unidas, pues estómago lleno, corazón contento.

       En un lugar donde la huella romana y árabe es tan profunda se gesta una cocina singular, de ahí que en estas tierras hayan adquirido renombre personajes como Picoco, natural de Begíjar, o Juanito de Baeza, aquellos maestros del arte culinario cuyos nombres quedaron grabados en los Anales de la Historia, o la figura de Mariana Martos Calles, mi bisabuela, que fue una gran cocinera según relata siempre mi madre, pues además de ser partera entre otras cosas, también fraguó grandes delicias entre ollas y sartenes en casas ajenas en bodas, bautizos y otras fiestas familiares con el fin de sacar adelante a sus hijas, lo cual queda en el ámbito de la intrahistoria como la definió Miguel de Unamuno, es decir, esa vida tradicional que sirve de "decorado" a la historia más visible, es decir la Historia de la gente poco importante.

       De todos modos, aquí sólo aparecerán recetas y creaciones literarias de un cocinero amateur, el cual disfruta con su buen hacer en la cocina y se complace viendo degustar sus platos a familiares y amigos, pues cocinar para uno mismo no tiene mérito, pero si hacerlo para los demás, teniendo en cuenta los gustos diferentes de cada cual.

       Por tanto, en este blog aparecerán entradas o bien con recetas de cocina hechas por el que suscribe, acompañadas en el mayor de los casos con fotografías ilustrativas, o bien por poemas si las Musas se dignan a visitar a este aedo del siglo XXI, de ahí que espero que guste a todos aquellos amantes de la cocina, los cuales son bienvenidos a dejar todos los comentarios que así estimen necesarios para mejorar las recetas que aquí se expondrán, compartir secretos culinarios o cualquier receta tanto de la región, del país o de cualquier punto del planeta, sea cual sea sus lugares de origen, pues la cocina así como la sociedad actual es intercultural.

       Bienvenid@s a tod@s

Jaén, gastronomía y realidad

         Aquí os dejo un artículo de Francisco Casas Delgado, aparecido en Diario Jaén el viernes 11 de enero de 2013, que versa sobre "Jaén, gastronomía y realidad", es decir, une el mundo literario con el mundo culinario y que mejor que este artículo para estrenar dicho blog, siendo autor de obras como las siguientes:

La cocina andaluza Guadalquivir  arriba. Charlas y recetas.

Don Picoco de los Cerros. Señor de los fogones, viajero incansable y anfitrión amable.

Don Picoco de los Cerros. Señor de los fogones, viajero incansable y anfitrión amable. 2ª Parte.



          Para hablar con propiedad de la gastronomía de Jaén hemos de referirnos en primer lugar al conjunto de platos típicos que se pueden encontrar en cualquiera de los pueblos y ciudades de la variada geografía de la provincia, y si le ponemos mucha afición y trabajo quizás lograremos completar una sabrosa e inacabable relación, a la que luego hemos de sumar el sinfín de ritos relacionados con la comida, actos en los que se toma tal o cual guiso concreto, ocasiones singulares en las que una persona determinada cocina para el grupo, fiestas en las que se ensalza y elabora un producto determinado, tradiciones diversas, romerías, matanzas, cacerías, butifueras, en definitiva, todos y cada uno de los mejores momentos que conforman la manera de vivir y entender las relaciones en torno a los fogones y la mesa, lo que en ella se sirve y la forma de consumirlo. Con todo este bagaje y agregando con generosidad y mucho mimo, el zumo de las aceitunas, podremos hacernos una idea aproximada de esta cultura culinaria que compartimos todos los que somos de Jaén, capital y pueblos, y digo bien, Jaén y sus pueblos porque cuando nos encontramos lejos y nos preguntan por nuestro origen decimos con cierto orgullo, precisando para que quede muy claro,  “yo soy de Jaén capital” y quizás se nos contesta con sencillez no exenta de una pizca de sorna  “pues yo soy de Jaén pueblo”, que así es como somos y nos sentimos los que llevamos por el mundo el honor de haber nacido aquí y la nostalgia de esta hermosa y noble tierra. Pues bien, Jaén tiene un símbolo universal por el que es conocido allende las fronteras, que es el aceite de oliva, y este es uno de los ingredientes fundamentales de la comida y sobre todo de la vida de toda la provincia, porque si en verdad hay un signo de identidad que define el paisaje, el trabajo, la economía, el pasado, el presente y el futuro, algo ligado de forma indisoluble al alma de este pueblo es el olivo. Esta relación tan profunda tiene sus raíces en la noche de los tiempos y es mágica porque se basa en la comunión entre el hombre y su alimento, en este caso el aceite que le permite satisfacer el primer instinto que es el de la supervivencia. Una vez aceptado que el aceite de oliva define lo giennense hemos de decir además que el trabajo que proporciona el olivar es el principal motor de la economía de la provincia y que el bienestar de todos depende de él. Por desgracia, la campaña de hogaño es muy escasa en producción y en jornales con lo que se esperan tiempos más que difíciles. Estamos hablando de una auténtica ruina y aunque somos un pueblo que sabe vivir de forma austera y que acepta bastante el sacrificio cuando es necesario apretarse el cinturón, va a ser más que imprescindible encontrar la fórmula para dar una solución racional a la falta de trabajo en el campo.


Pechuga de pavo en salsa de naranja

               Este plato combina sabores salados y ácidos, no obstante, es un gran placer para los sentidos paladearlos y seguro que no dejará a nadie indiferente.

     Si pruebas a hacer la receta querid@ lector, por favor, haz algún comentario al respecto.

Ingredientes (para 3 personas):
>6 filetes de pechuga de pavo
>medio pimiento rojo
>una lata de guisantes de 200 gr.
>zumo de 4 naranjas
>sal
>pimienta
>hierbas provenzales
>maicena (harina de trigo)

1/ En primer lugar, cortar en tiras finas medio pimiento rojo y freír durante 5 minutos removiendo continuamente para no dejar que se queme. Cuando esté listo, retirar de la sartén y verter en una cazuela con fondo.

2/ A continuación, salpimentar y sazonar los filetes de pavo con hierbas aromáticas.

3/ Freír los filetes de pavo y cuando la carne esté sellada añadirla a la cazuela junto al pimiento.

4/ Agregar la lata de guisantes una vez escurrido el caldo y el zumo de 4 naranjas, del cual habremos separado un poco para desleír en él un poco de maicena (harina de maíz), con el fin de espesar la salsa y ésta quede ligada.

5/ Mantener en el fuego de 10 a 15 minutos hasta que la salsa vaya espesando a fuego medio, teniendo cuidado de que no se queme.

6/ Por último, se puede acompañar con arroz blanco cocido con pequeños daditos de zanahoria.

Pimiento rojo frito
Agregar filetes de pechuga de pavo


Agregar guisantes y zumo de naranja

Emplatado y acompañado de arroz blanco con zanahoria


Apfelstrudel

Postre austriaco, preparado con manzanas, canela y pasas.

La receta original no lleva higos secos, pero como tenía en casa, se los he añadido y les ha dado un toque muy sabroso.

Ingredientes:
>3 manzanas ácidas
>50 gr. de pasas
>4 higos secos
>70 gr. de azúcar
>1 sobre de azúcar vainillado
>50 gr. de mantequilla
>canela en polvo
>una base de hojaldre

1/ En primer lugar, pelar y descorazonar las manzanas y a continuación filetearlas finamente.

2/Acto seguido, agregar el azúcar, el azúcar vainillado, la canela, las pasas y los higos secos cortados en trocitos. Mover bien para que todos los ingredientes se mezclen bien.

3/ A continuación, estirar bien la masa del hojaldre sobre el papel de horno en el que viene enrollado, pues aunque se podría hacer también en casa, en el mercado hay ya pasta fresca de hojaldre que nos viene perfectamente para la receta.

4/ Esparcir la mezcla obtenida sobre el centro de la masa, dejando un borde suficiente para poder cubrir completamente dicha mezcla.

5/  Enrollar bien y dejarlo sobre el papel de horno, doblando bien y sellando los lados de la masa con un tenedor.

6/ Con la ayuda de un pincel, bañar el strudel con mantequilla fundida y pinchar ligeramente la parte superior con un tenedor.

         7/ Por último, hornear durante 40 minutos, tras haber precalentado el horno a 210 ºC.



Recién sacado del horno

Emplatado


Al corte

Poesía I


          He aquí una poesía cuya inspiración vino estando durmiendo y que me hizo levantar en medio de la noche para ponerme a escribirla.

Tú, que callas cuando hablas;
tú, que estás cuando no estás;
tú, mi alma gemela destinada,
tú, ¿dónde te hallarás?
¿Acaso en un susurro imperceptible?
¿acaso en el brillo de una gota de rocío?,
¿o acaso en el solo recuerdo de algo que no fue?
Tú, sólo tú.

                                              (31 de marzo de 2011)